Por la libertad de Juan Chamorro, en Nicaragua

El pasado 8 de junio mi querido amigo Juan Chamorro y su esposa fueron detenidos en Nicaragua por el régimen del presidente Ortega. Juan es actual precandidato a las elecciones presidenciales y ha sido acusado de lavado de activos, junto a otros líderes de la oposición al gobierno.

No dejo de imaginarme las dificultades que está atravesando en este momento Juan, a quien me une una gran amistad, pues fuimos compañeros de la maestría en Economía en Chile. Fuimos parte de un grupo de jóvenes soñadores latinoamericanos que queríamos contribuir a resolver los grandes problemas de desigualdad y pobreza en nuestros países.

En su cuenta en Twitter, el secretario general de la OEA, Luis Almagro, señaló este 9 de junio que «urge la liberación de Juan Sebastián Chamorro y de todos los demás presos políticos en Nicaragua, y que cese el hostigamiento y la opresión de la dictadura del patricida Daniel Ortega».

El presidente de Nicaragua, señor Daniel Ortega, lleva 14 años en el poder y antes fue líder del partido Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN).  Según el informe elaborado por el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Acnudh), a fines del 2019, el gobierno de Ortega es “responsable de violaciones a los derechos humanos, como torturas, obstrucción a la atención médica, detenciones arbitrarias, secuestros, violencia sexual, entre otros hechos”.

Nicaragua no solo atraviesa una profunda crisis política, sino que además está en recesión económica, pues ha enfrentado una contracción económica sostenida desde el 2018, con tasas de decrecimiento del Producto Bruto Interno (PBI) del 4.0%, 3.9% y 6.5% en los últimos tres años. Este manejo económico y político ha traído como consecuencia que al cierre del 2020, Nicaragua, según datos de la CEPAL, ocupe el primer lugar en pobreza extrema, si se comparan los 17 países que forman parte de Latinoamérica, con el 8.6% de su población en esta situación de gravísima vulnerabilidad.

Seguidores de Pablo Milanés, Silvio Rodríguez, Facundo Cabral y Mercedes Sosa, hoy les recuerdo a mis queridos amigos iladianos (maestría en economía organizada por ILADES y Georgetown University) que aquí estamos de pie, por Juan y por nuestros sueños, por una América Latina en la que exista igualdad de oportunidades, menos pobreza y mejor acceso a la educación y salud de los más necesitados. 

Sigamos en la lucha para que Juan sea liberado. Y con él, sigamos el ejemplo de la lucha frontal contra la corrupción y la pobreza, porque el presente y el futuro dependen de nuestro compromiso con la defensa del Estado de derecho y con el respeto a las instituciones que deben procurar el bien común de la sociedad.