Más exploración en cobre y minería para reducir pobreza

El Ministerio de Energía y Minas (Minem) a través de la Dirección General de Promoción y Sostenibilidad Minera, ha presentado recientemente la edición de la cartera de proyectos de exploración minera para el año 2023. Esta cartera se compone de un total de 74 proyectos localizados en 17 regiones del país, los cuales representan una inversión global de US$ 596 millones.

De los 74 proyectos incluidos en la cartera, treinta se encuentran actualmente en ejecución o en vías de iniciar dicha fase, lo cual implica que han obtenido los permisos necesarios tanto del Minem como de otras entidades estatales, y suman una inversión de US$ 134 millones, lo que equivale al 22.5% del total. Otro grupo de 17 proyectos, que suma una inversión de US$ 136 millones (22.7% del total), se halla actualmente en la etapa de evaluación de la autorización de exploración, mientras que los 27 proyectos restantes están siendo evaluados en términos de su Instrumento de Gestión Ambiental (IGA), y suman una inversión de US$ 327 millones (54.8%).

En lo que respecta al tipo de minerales a explotar, el cobre ocupa el primer lugar con 39 proyectos (más de la mitad del total) y una inversión de US$ 284 millones. El oro se sitúa en segundo lugar con 18 proyectos y una inversión de US$ 220 millones. El zinc cuenta con nueve proyectos y una inversión conjunta de US$ 47 millones, mientras que la plata y el litio, con ocho proyectos cada uno, suman una inversión de US$ 46 millones.

El Perú se destaca como el segundo mayor productor de cobre a nivel mundial, con una producción anual de 2.5 millones de toneladas métricas (TMC). No obstante, se estima que podría aumentar su producción hasta superar los cuatro millones de TMC si todas sus inversiones en el sector estuvieran en ejecución de acuerdo con las concesiones, contratos y compromisos programados. De esta forma el país experimentaría un crecimiento que superaría el 5% de su Producto Bruto Interno (PBI) y la tasa de pobreza se reduciría por debajo del 15% de la población, consolidando su condición como sociedad de ingreso medio y con una amplia clase media.

A pesar de estas posibilidades, el Perú actualmente solo produce 2.5 millones de TMC de cobre al año. En el futuro cercano, se espera que la demanda de este metal aumente drásticamente debido al desarrollo de tecnologías como las energías renovables y la industria de los vehículos eléctricos. Entonces, ¿por qué el Perú no ha logrado avanzar como potencia en la producción de cobre?

En una primera etapa, la oposición a nuevos proyectos mineros se basó en argumentos supuestamente ecológicos y ambientalistas. Durante el Gobierno de Ollanta Humala, se desencadenó una guerra de los antimineros en contra del proyecto Conga, en Cajamarca, que incluyó incluso la intervención de arbitrajes internacionales que desmintieron la "supuesta intangibilidad" de algunas lagunas. A pesar de ello, Conga y otros proyectos –como La Granja, Galeno y Michiquillay– quedaron paralizados.

La negación de inversiones en el norte del país impidió una producción adicional de alrededor de un millón de TMC. En el sur, se bloqueó el proyecto Tía María, en el que se generaron historias fantásticas sobre la ecología y el agua. Actualmente, la concesionaria del proyecto, Southern Perú, ha propuesto construir la represa de Paltiture, pero aún enfrenta resistencia por parte de grupos antimineros.