Interrogantes necesarias sobre Tía María

Según la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE), en 2019 la producción minera se redujo en 0.84% y las exportaciones de minerales se contrajeron en 2.9%, ocasionando pérdidas de puestos de trabajo. Asimismo, el Ministerio de Energía y Minas (Minem) informó que las inversiones mineras cayeron 13.6%. De otro lado, en 2019 no hubo inversiones nuevas. Los proyectos en desarrollo –Mina Justa en Ica, Quellaveco en Moquegua, y la ampliación de Toromocho en Junín– son proyectos del 2018. 

Según la SNMPE, las exportaciones de cobre, que representan el 29% de las exportaciones del sector, cayeron en 7%. "Pese al enorme potencial, Perú pierde participación en el mercado mundial", ha señalado Gonzalo Tamayo, ex titular del Minem. Una de las causas de la caída de la producción y de los envíos al exterior es la acción de los grupos antimineros.

No obstante el retroceso de la actividad minera, el presidente Martín Vizcarra anunció que durante su gobierno el proyecto de cobre Tía María, en Arequipa, no va. Detener Tía María afecta a la seguridad jurídica y a las inversiones locales y extranjeras. En el escenario internacional, el riesgo país se incrementa. 

Tía María es un proyecto de talla mundial que cumplió con todos los procedimientos legales hasta obtener la licencia de construcción de la mina. Una denuncia por parte de las autoridades del Gobierno Regional de Arequipa ante el Consejo de Minería (CM) pretendió anular la licencia de este proyecto. Una última decisión del CM confirmó la licencia y Tía María quedó expedita para iniciar la construcción de la mina. No obstante, los directivos de la minera Southern, concesionaria de Tía María, señalaron que se tomarían un tiempo para absolver todas las inquietudes de la comunidad. Mientras tanto, la minera continúa desarrollando actividades vinculadas a la educación, salud, ganadería y agricultura en los distritos de la provincia de Islay (Arequipa). 

Frente al fracaso de la demanda ante el CM, Elmer Cáceres, gobernador de Arequipa y principal opositor de Tía María, pretendió retirar los derechos de servidumbre (derecho de paso), de 49.5 hectáreas en las pampas Cachendo, otorgados a Southern para que realice sus operaciones mineras. Ante la ilegalidad cometida, Cáceres retrocedió y ahora pretende declarar reserva ecológica la zona de Cachendo. 

En este escenario de leguleyadas por parte de las autoridades arequipeñas, el mandatario Vizcarra comete el grave error de declarar que Tía María no va durante su gobierno. El problema es que el bloqueo del mencionado proyecto no solo afectará las posibilidades de desarrollo en el valle de Tambo y Arequipa sino que, de una u otra manera, afectará a todo el Corredor Vial del Sur, en donde se emplazan Cerro Verde, Las Bambas, Antapaccay, Constancia, entre otros emprendimientos. En este portal lo hemos repetido infinidad de veces: en el sur se produce más del 50% del cobre nacional.

Los sectores antimineros luego de paralizar Conga y el llamado Cinturón de Cobre del Norte (el propio Conga, Galeno, La Granja, Michiquillay, entre otros), que podría agregar 1.5 millones de toneladas métricas de cobre (TMC) a la actual producción nacional de 2.5 millones de TMC, han convertido el bloqueo de Tía María en la madre de todas sus batallas. El objetivo de esta estrategia radical es simple: bloquear la minería para que el Perú se acerque el abismo de la recesión. Si lo consiguen el crecimiento será casi cero y la pobreza volverá a aumentar. En este contexto, las próximas elecciones del 2021 podrían convertirse en un “juicio popular” en contra de la economía de mercado y las inversiones y el régimen económico de la Constitución.

Por todas estas consideraciones, el Ejecutivo debe recuperar la coherencia en cuanto a la minería y respaldar abiertamente el proyecto Tía María en Arequipa.