Alrededor de 40,000 hectáreas de cultivos del proyecto ...
El DS 122-2018-PCM del 14 de diciembre pasado, que incorpora el Organismo de Supervisión de los Recursos Forestales y de Fauna Silvestre —Osinfor, de la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM)— al Ministerio del Ambiente (Minam), ha causado revuelo nacional e internacional. El motivo: la Oficina de Representantes de Comercio de EE.UU. (USTR) considera que estaría violando la independencia del organismo fiscalizador.
El Acuerdo de Promoción Comercial (APC) entre Perú y Estados Unidos establece la independencia de los organismos supervisores, como Osinfor. Respondiendo a la consulta de los representantes norteamericanos, el ministro del sector Comercio Exterior y Turismo (Mincetur), Edgar Vásquez, ha señalado que Perú respeta sus compromisos adquiridos y que la decisión de incorporar el Osinfor al Minam obedece a la Ley Marco de Modernización de la Gestión del Estado, que fue comunicada al Congreso estadounidense.
Ante esta situación el congresista Jorge Meléndez, de Peruanos por el Kambio (PpK), ha presentado el proyecto de Ley Nº 3782/2018-CR, que busca que el Osinfor retorne a la PCM en abierta contradicción con el criterio del Gabinete Villanueva.
Como se sabe, las funciones de Osinfor no solo son de supervisar y fiscalizar las actividades de los concesionarios forestales sino, además, “ejercer su potestad sancionadora dentro del ámbito de su competencia”. Como se sabe que el Minam también desarrolla diversas actividades relacionadas con proyectos de forestación, reforestación y conservación del medio ambiente. ¿Cómo podría, entonces, Osinfor —de encontrar alguna irregularidad en el manejo de esos proyectos— ejercer sus potestades teniendo una dependencia directa del Minam, que ejerce políticas sobre concesiones forestales? ¿No estaría acaso el Minam en situación de juez y parte? Diversos programas, incluso financiados por organizaciones internacionales y ejecutados por el Minam en las comunidades nativas, ¿serán supervisados con la debida imparcialidad que también reclaman los 4,800 concesionarios forestales en todo el país?
Según denuncian los titulares de las concesiones forestales, sus actividades están cubiertas por una nube gris que los señala como ilegales y hasta delincuentes. Las sanciones —según ellos— abusivas y carentes de legalidad en muchos casos, son sobredimensionadas por una prensa vinculada a las ONG ambientalistas con el propósito de generar desconfianza en la población. Si Osinfor es parte del Minam —sostienen— no hay garantías para mejores prácticas en el manejo forestal.
En el Acuerdo Comercial con Estados Unidos se establece que los organismos supervisores deben estar libres de toda interferencia que pueda desnaturalizar el correcto desarrollo de las actividades forestales. Si la designación de los ministros de Estado es política, ¿cómo así el director ejecutivo de Osinfor será totalmente autónomo e independiente de cualquier interferencia, por ejemplo, vinculada al ambientalismo ideológico que obstaculiza las labores forestales?
Para el especialista en derecho forestal Carlos Cabrejos, “la agenda ambientalista no es la prevención, sino la persecución y sanción”. Señala que las autorizaciones emitidas para el cambio de uso en los bosques apenas han llegado a 100 hectáreas, mientras que la tala ilegal se expande cada año en 165,000 hectáreas.
La consulta realizada por la Oficina de Representantes de Comercio de Estados Unidos al Gobierno peruano no implica ningún tipo de represalia. Sin embargo, se podrían activar los mecanismos correspondientes para solucionar la controversia relacionada con el APC. Una demanda contra Perú, por la violación de una de las cláusulas del acuerdo comercial, podría perjudicar a otros sectores exportadores del país. Los envíos agrícolas a Estados Unidos resultan afectados si los representantes estadounidenses insisten en la independencia del organismo supervisor y el Gobierno persiste en incorporar el Osinfor al Minam. Los representantes estadounidenses esperan que la decisión peruana sea revertida lo más pronto.
Al margen de la consulta norteamericana, la adhesión del Osinfor al Minam tendría otras implicancias. La ministra del Ambiente, Fabiola Muñoz, fue jefa del Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor), nombrada durante la gestión del ex presidente Ollanta Humala y ratificada por el ex presidente Pedro Pablo Kuczynski. Para nadie es un secreto que la señalada ministra tiene inclinaciones a favor del ambientalismo.
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