María Cecilia Villegas
¿Y tu prójimo?
Sobre la visión del desarrollo de nuestra clase empresarial y la cohesión social.
Contrariamente a lo que se cree en el Perú, no basta con el crecimiento económico para lograr el desarrollo, porque se puede crecer capturando rentas, sin fortalecer las instituciones ni garantizar la seguridad. Pero ese crecimiento tiene un límite y lo estamos viendo. Una de las condiciones para cruzar el umbral del desarrollo es que exista cohesión social, que es la capacidad que tiene una sociedad para asegurar el bienestar de todos sus miembros, al minimizar las disparidades y evitar la polarización. Ello porque existe un interés de grupo para lograr el desarrollo y que todos los ciudadanos, de acuerdo a su esfuerzo individual, puedan disfrutar de los beneficios. Es por ello que quienes sostenían que Conga debía desarrollarse a la fuerza, sin importar que las comunidades cercanas se opusieran, se equivocan. De la misma manera también se equivocan quienes sostienen que las grandes empresas extractivas no tienen mayor obligación que la de cumplir los contratos suscritos con el estado, extraer el mineral y pagar impuestos.
Una muestra de la falta de cohesión social que existe en el Perú se desprende de un estudio de Víctor Shiguiyama, en el que se hace una interesante comparación entre el ingreso per capita de Perú y Chile y la participación de sus ciudadanos en actividades filantrópicas.
De acuerdo al Banco Mundial, el PBI per cápita en el Perú es de US$6,600 y el de Chile es US$15,700, esto es, el de Chile es aproximadamente 2.3 veces mayor que el del Perú. Sin embargo, utilizando datos de las recientes teletones, podemos ver la diferencia entre el compromiso social de sus ciudadanos. En la teletón en Chile (Noviembre 2014) se recaudó US$46.3 millones y en la del Perú (Noviembre 2014) US$ 2.3 millones. Esto es, en el Perú se recaudó veinte veces menos que en Chile. La mayor donación individual en Chile fue de la familia Luksic por US$ 4 millones, mientras en Perú fue de US$130,000 realizada por el BCP. Esto es, la empresa peruana que más se comprometió con la Teletón, donó treinta veces menos que la empresa Chilena.
La distribución de ingresos entre Perú y Chile es similar, sin embargo en el Perú donamos 8 veces menos en promedio (relativo solo a ingresos), mientras que comparando a los mayores donantes, en Chile comparten 12 veces más que en el Perú.
Chile forma parte de la OECD, a donde los empresarios peruanos nos dicen que el Perú ya va a llegar, que estamos a un pasito. Pero parece que nuestros empresarios no entienden qué significa ser un país desarrollado. Y ello no pasa exclusivamente por lograr que el PBI per cápita supere una valla. ¿Cómo lograremos el desarrollo si nos oponemos a la planificación centralizada pero al mismo tiempo carecemos de una visión de país y de compromiso del sector empresarial? Cabe resaltar el reciente esfuerzo del empresario minero Eduardo Hochschild con la Universidad de Ingeniería y Tecnología - UTEC. Si queremos que el Perú se convierta en un país desarrollado, necesitamos más empresarios con visión de país, invirtiendo en el futuro. Necesitamos cohesión social, porque de nada sirve que el 1% crea que vive en la OECD, mientras la población más pobre no tiene sus necesidades básicas satisfechas.
Por Ana Luisa Guerrero
(29 - Ene - 2015)
COMENTARIOS