Salud mental en el Perú: desafíos, estigmas y caminos hacia el bienestar

La salud mental de los jóvenes en el Perú es un tema de creciente relevancia y preocupación en la actualidad. Los jóvenes enfrentan una serie de desafíos únicos que pueden afectar su bienestar psicológico, como el estrés académico, las presiones sociales, la incertidumbre sobre el futuro y la exposición a la violencia y otros eventos traumáticos. A pesar de la importancia de la salud mental en esta etapa de la vida, muchos jóvenes peruanos enfrentan barreras significativas para acceder a servicios de salud mental adecuados, incluidas la falta de recursos, la estigmatización asociada con los trastornos mentales y la escasez de profesionales capacitados en salud mental.

En el año 2021, durante la coyuntura de la pandemia, el Ministerio de Salud, junto con el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, el Ministerio de Educación y UNICEF realizaron una encuesta cuyos resultados fueron alarmantes. El 29.6% de la población entre los 12 y 17 años tiene riesgo de padecer algún problema de salud mental o emocional. Frente a este resultado, el jefe del Departamento de Psicología del Hospital Víctor Larco Herrera, Iván Lizárraga afirmó que “en el contexto del covid-19 los lazos familiares en el hogar se habían deteriorado, poniendo en riesgo la salud mental de los adolescentes”.

Sin embargo, en el año 2023, la Secretaría Nacional de la Juventud (Senaju) publicó un artículo con los resultados de la Encuesta Demográfica de Salud Familiar, realizada por el INEI: el 32.3% de jóvenes entre 15 y 19 años presentaban problemas de salud mental y emocional. Al respecto, Magaly Villafuerte Falcón, titular de la Secretaría Nacional de la Juventud, indicó que “la falta de recursos, estrategias e iniciativas ha puesto a la salud mental en gran deterioro, cuando debería ocupar un lugar prioritario en la agenda política, con el fin de trabajar de manera urgente e inmediata”.

A pesar de ser números alarmantes, estos datos no son sorpresa. A final del año 2023, casi el 50% de la población que presentó algún tipo de enfermedad no tuvo acceso a los servicios de salud básicos, dejando en claro que hoy en día, en el Perú, el presupuesto dedicado a la salud mental es mínimo (2% del presupuesto total asignado al sector de Salud). En este año 2024 se busca ampliar el presupuesto asignado. El Gobierno de Dina Boluarte ha anunciado un aumento significativo en el presupuesto destinado al sector salud para el año 2024, con una proyección de inversión de S/ 29,474 milloneses. Esto representa un incremento del 9% en comparación con el presupuesto del año anterior.

Admitir que se tiene un problema de salud mental puede ser difícil debido a los estigmas asociados. Algunas personas creen erróneamente que los problemas de salud mental son el resultado de una debilidad personal o falta de carácter, lo que puede hacer que aquellos que sufren se sientan avergonzados o culpables. Esta falta de apoyo puede agravar los problemas y dificultar la recuperación. Es crucial abordar estos estigmas mediante la educación y la conciencia pública para garantizar que los jóvenes busquen ayuda sin sentirse avergonzados o estigmatizados

Los problemas de salud mental en el Perú son una preocupación significativa que afecta a una parte importante de la población, especialmente a los jóvenes. La falta de conciencia, los estigmas asociados, la escasez de recursos y el limitado acceso a servicios especializados son desafíos importantes que enfrentan las personas que sufren de trastornos mentales en el país. Es de vital importancia que se tomen medidas para abordar estos problemas; incluidas la promoción de la salud mental positiva, la sensibilización sobre los trastornos mentales y la mejora del acceso a servicios de salud mental de calidad.