Franco Germaná Inga

La estrategia Vilcatoma

La estrategia Vilcatoma
Franco Germaná Inga
14 de febrero del 2017

Escenario hipotético producto del caso Lava Jato y desaprobación de la clase política

Partiremos de la premisa de que la política es impredecible. Actualmente el caso Lava Jato ha profundizado la desaprobación generalizada de la clase política del país, lo cual hace que el 2021 sea más impredecible aun y que pueda tener un desenlace sorprendente. En esta columna, exploraremos el escenario hipotético de una eventual candidatura presidencial de Yeni Vilcatoma.

Primero, lo primero ¿quién es Yeni Vilcatoma? Según su Hoja de Vida presentada ante el Jurado Nacional de Elecciones, ella es abogada de profesión y, entre otros cargos, se ha desempeñado como fiscal adjunta superior en la Fiscalía Superior Especializada de Corrupción de Funcionarios de Loreto, procuradora adjunta en la Procuraduría Pública Especializada en Delitos de Corrupción de Funcionarios, locutora de radio en Corporación Universal S.A.C (radio Exitosa) y ahora es Congresista de la República por el periodo 2016-2021.

Como bien se recuerda, Vilcatoma adquirió notoriedad pública en 2014 cuando era la procuradora encargada del caso “La Centralita”, y grabó y difundió una conversación telefónica que mantuvo con su jefe, el entonces ministro de Justicia, Daniel Figallo. Ella lo acusó de ejercer presión política al mostrar un interés irregular por la situación legal de Martín Belaunde Lossio, quien fuera jefe de campaña del expresidente Humala en 2006. Asimismo, Vilcatoma no solo grabó al ministro, sino que también le escribió una carta al presidente Humala pidiéndole su destitución. En respuesta, Figallo la despidió “en vivo”, en horario estelar de la televisión nacional. Vilcatoma perdió su trabajo, pero se ganó la reputación de abanderada de la lucha contra la corrupción.

Posteriormente, por una hábil táctica política que respondía a la necesidad de Fuerza Popular de “limpiar” su pasivo de corrupción de los años noventa, este partido la invitó a ser candidata al Congreso otorgándole el expectante N° 2 de la lista por Lima. Ella aceptó. Era la oportunidad de su vida ya que debido a su reputación ganada en la lucha contra la corrupción y el número en la lista, su elección era prácticamente un hecho. En efecto, Vilcatoma fue electa congresista con una de las más altas votaciones, teniendo como propuesta bandera que la Procuraduría Pública ya no dependa del sector Justicia y, por ende, del gobierno de turno; en lugar de ello la Procuraduría sería autónoma para que defienda los intereses del Estado. Así se facilitaría que esta institución investigue a funcionarios de los gobiernos de turno.

Una vez en el Parlamento, dado su historial, Vilcatoma fue electa presidenta de la Comisión de Fiscalización, que es quizás la que brinda mayor exposición y réditos políticos. No obstante, debido a discrepancias con miembros de su bancada en torno al Proyecto de Ley de la Procuraduría Autónoma, ella renunció a la bancada fujimorista, habiendo pertenecido a ella solo dos meses. Se especuló mucho acerca de a qué bancada se integraría; no obstante, ella prefirió mantenerse como congresista no alineada.

Es por todo ello que Vilcatoma puede estar motivada a tentar la presidencia el 2021. En el caso hipotético (muy posible), de que el caso Lava Jato termine hundiendo a gran parte de la clase política, ella podría ensayar una candidatura con el siguiente mensaje: “Soy una abogada que ha sido despedida por ser excesivamente independiente, renuncié a la bancada fujimorista en el Congreso por discrepancias irreconciliables y no fui otoronga, me mantuve independiente y fiel a mis votantes, dedicada a investigar actos de corrupción. Soy mujer y soy valiente, nunca he temido enfrentarme a los poderosos. Elíjanme y yo haré que los corruptos entren a la cárcel”. Hay una relación directamente proporcional: entre más corrupción tenga la clase política, más atractivo se vuelve este mensaje y su mensajera.

Este columnista sospecha que esta estrategia rumbo a Palacio ya se le ha cruzado por la cabeza a la congresista Vilcatoma. ¿Ganaría o no? Eso es algo que ni Dios ni todos sus santos pueden responder.

Franco Germaná Inga

@FrancoGermana

 
Franco Germaná Inga
14 de febrero del 2017

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