José Madero: la pérdida de fe y el abandono del catolicismo

En un reciente podcast, el peleador de lucha libre canadiense "Vampiro" (poco conocido en el Perú, pero muy popular en México en dónde desarrolló su carrera llegando a formar parte de la farándula mexicana noventera), entrevistó a José Madero Vizcaíno, voz principal del grupo mexicano PXNDX, banda que fue sin dudas el principal referente de la movida "emo" en Latinoamérica en la segunda mitad de los dos mil.

Lo más llamativo de dicha entrevista, es que tocaron temas de fe y religión, en la que ambos hablaron sobre cómo y por qué dejaron de ser católicos reflejándose señeramente dos cosas:

1.- Se abandona la Iglesia Católica cuando te la enseñan mal; es decir, cuando la formación recibida al respecto es muy pobre al punto de difuminarse las certezas básicas que trazan un camino claro por recorrer. Esto ocurre muchas veces, por no dedicar tiempo a una atención personalizada más allá de una enseñanza grupal. Este sería el caso de Madero.

2.- Se pierde la fe y la práctica religiosa ante un mal testimonio, como lo que ocurre cuando el encargado de transmitirnos la fe y la religión, muestra comportamientos y actitudes que desdicen lo enseñado, llegando a cometer actos tan extremos como el abuso sexual. Este es el caso de "Vampiro" quién lo contó desgarradoramente ante la sorpresa de Madero.

¿Y qué puede ocurrir cuando se abandona toda práctica religiosa por estos motivos? Pues casi siempre, la seguridad en la existencia de un Dios que jamás te va a defraudar y que siempre cumplirá todas sus promesas de amor contigo se va a ir desvaneciendo, ante lo cual, sólo queda:

1.- El camino de la sobrevivencia (con o sin ayuda profesional): este sería el caso de "Vampiro", quién pareciera haberle dado un sentido a lo ocurrido cuando dice: "hoy en día puedo reír porque si alguien ve esto y hay algo similar, a lo mejor riendo, hay una esperanza de que sí pueda superar eso".

2.- La desesperanza en alcanzar una vida plena (el Reino de Dios), viviendo sólo con miras a disfrutar de los placeres que puedan obtenerse en este mundo. Este sería el caso de Madero, quién creció en una familia católica pero que, a sus cinco años (tal y como él mismo lo cuenta en su libro autobiográfico "Pensándolo Bien, Pensé Mal"), el divorcio de sus padres lo dañó mucho hallando refugio en la música y escribiendo canciones en las que desprecia todo atisbo de amor y felicidad plena.

Por ejemplo, la canción más conocida de PXNDX se llama "Los malaventurados no lloran" (parafraseando una de las Bienaventuranzas) en donde dice frases como: "aquí todo está peor, que al igual que ella, mi voluntad también murió; le quiero platicar que todo sale mal, que yo la alcanzaría teniendo una oportunidad"

Por ello, no debemos ser duros ni portarnos como jueces implacables con aquellos que han abandonado la Iglesia Católica, sino más bien, pienso que debemos hallarles, entablar amistad genuina, comprenderlos y mostrarles con ello un camino distinto a la par de nuestras propias luchas personales. Y esto, no está reñido con realizar pronunciamientos firmes y caritativos ante la ofensa o el error.