Dardo López-Dolz
Cazando con dos cañones
Sobre la penetración política e ideológica del totalitarismo en América Latina
Solo un ciego negaría la existencia de un modelo totalitario, con dirección caribeña y financiado por la potencia del oriente, ávida de mercados, que ha venido desmontando a distinto ritmo, pero con innegable éxito, el respeto a la libertad en Venezuela, Bolivia, Ecuador, Nicaragua, Bolivia, Argentina y Brasil y que ahora saltando el charco amenaza la ¨madre Patria¨.
Ese modelo presenta dos características que lo hacen fuerte: La primera es su eficiente planeamiento a largo plazo. Hierran con ingenuidad virginal los irónicamente curtidos empresarios que, cortos de visión, respiran tranquilos al no ver riesgos a simple vista. Hace falta prismáticos potentes para ver la inmensa trampa para la libertad que define lo humano y la supervivencia del actuar empresarial honesto.
La segunda, es su inmensa flexibilidad. Hierran mortalmente los analistas y periodistas que, con rigor científico pero absoluta falta de ¨esquina¨, esperan encontrar los mismos rasgos del fallecido líder venezolano del inicio de esta suerte de reinado del anticristo. Como el diablo (algunos dirán ¨que lo inspira¨), el modelo tiene diversos ropajes que usa según aconsejen las expectativas de los votantes.
Que pruebas más claras que el abismo intelectual existente entre el académico Correa o el inteligente ¨Yo Claudio¨ Hugo Chavez y su sucesor .
Quienes dudan de la existencia de una organización pensante, pudiente y con muy mala leche, debieran estudiar como un individuo inculto y con serias limitaciones intelectuales ha logrado derrotar y mantener a raya la otrora poderosa clase política boliviana, conformada por profesionales exitosos académica y empresarialmente, formados en las mejores escuelas de occidente y con experiencia genética de poder real.
El discurso ideológico no es más que el traje o disfraz adecuado para encandilar al votante, mayoritariamente despistado y genuinamente fastidiado con la inseguridad, la corrupción y la inoperancia de un sistema que no siente útil ni suyo. Claro que una vez instalados ellos, todo empeora, pero no hay marcha atrás si no es a balazos y eso es muy difícil en tiempos en que la valentía ha dejado de ser políticamente correcta, merced a genial labor de zapa mediática.
Un tercer rasgo del sistema es ¨cargar varios cañones, por si alguno de ellos falla. Así, mientras ensaya la viabilidad de beligerantes y verborreicos caciques de bandas de delincuentes regionales, entrenados en La Habana, no es de extrañar que sondee la viabilidad de auparse en la moda del ¨género¨ proponiendo una primera dama para lo que inadvertidamente un ministro, traicionado por su cabecita castrense, acaba de denominar denominado ¨relevo¨.
En un país cuya población ha sido inducida sistemáticamente con mentiras y fábulas a renegar del 50% europeo de su mestizaje cultural y biológico, dejando huérfana su identidad por negación de la madre, donde la formalidad y la profundidad del conocimiento, capaz de elegir iletrados timoratos, ¿Por qué no ensayar un individuo cachaciento, inescrupuloso y prepotente con modales de ambulante? Si el imaginario popular añade virtudes automáticas al ser general de ejército, ¿Por qué no poner juntas las piezas?
Al titiritero cubano, le gusta entretener con varios títeres. Algunos aplauden
Dardo López-Dolz Madueño
(25 - nov - 2014)
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