Peligra el crecimiento del campo

El reporte de la Superintendencia Nacional Aduanas y de Administración Tributaria (SUNAT) correspondiente al periodo enero-diciembre 2018 señala que, en total, la exportaciones nacionales se incrementaron en 11.7%. El crecimiento de los envíos comerciales se debe al aumento de 10% de las exportaciones tradicionales y al 14.9% de expansión del sector no tradicional. Los principales destinos de las exportaciones no tradicionales son China (con una participación de 28.5% del total de envíos) Estados Unidos (16.3%), Corea del Sur (5.7%) e India (5.3%).

Igualmente, el rendimiento del sector agropecuario continúa siendo alentador. De acuerdo al mismo reporte de la SUNAT, los envíos al extranjero de este rubro alcanzan la suma de US$ 4,073 millones, que representa el el 42.3% de todos los envíos no tradicionales. El crecimiento del sector agropecuario se explica por el aumento de envíos de paltas (en 23.1%), uvas frescas (33.7%), mangos (46.2%) y arándanos (68.4%), entre otros. De esta manera, el sector agropecuario mantiene la tasa promedio de crecimiento anual de 8.2% registrada en los últimos cinco años.  

Sin embargo, el boom continuo de las exportaciones del sector agrario podrían detenerse si la ampliación de la vigencia de la Ley de Promoción Agraria, (Ley Nº 27360) sigue entrampada en el Congreso de la República. Entre las principales modificaciones, establecidas en un dictamen listo para ser debatido en el Congreso, están la ampliación de la vigencia de la Ley hasta el 2024, los 30 días de vacaciones para los trabajadores y el incremento del aporte a EsSalud, del 4% al 6%.

Las inversiones en el sector agrario son de alto riesgo y necesitan mayor tiempo para su consolidación. Por ejemplo, si la estabilidad social, política y económica del país se mantiene, en los próximos 30 años se desarrollarían más US$ 5,000 millones de inversiones privadas en Piura, La Libertad, Lambayeque, Áncash y Arequipa. En este contexto, el plazo de ampliación de la vigencia de la mencionada ley, planteado en el dictamen, aparece insuficiente para convertir al campo en motor de crecimiento y reducción de pobreza.

Por su lado, el premier César Villanueva ha observado el aumento del aporte a EsSalud, aduciendo que debería ser mayor. Al respecto, vale decir que los servicios de EsSalud no existen en el campo. Las empresas han organizado postas y centros médicos para atender a sus trabajadores, quienes también utilizan los servicios médicos del sector Salud (Minsa).

El enfrentamiento entre el Legislativo y el Ejecutivo, la judicialización de la política y el copamiento de las instituciones por las ONG izquierdistas debilitan al mercado, dañan los climas de inversión privada y favorecen a las posiciones antisistema, en contra del mercado libre. Todos los esfuerzos realizados durante los últimos 18 años (800% de crecimiento de las agroexportaciones), podrían perderse si el Ejecutivo insiste en la polarización del país. Y si la izquierda representada en el Parlamento continúa planteando tesis obsoletas, sobre “derechos laborales ganados”, estabilidad laboral y sueldos mínimos, el país volverá a la pobreza y a la desestabilización política.