Noticias del gran mundo

Siempre se ha dicho que la eterna vigencia del western como género cinematográfico se debe a que, de alguna manera, es el relato épico de la fundación del gran país del norte: la conquista de un gran territorio inhóspito para imponer la ley y los valores occidentales. Y aunque esto último podría ser cuestionado, a la luz de los cambios de lo “políticamente correcto” el western –a pesar de haber perdido mucho de su popularidad– ha sabido asimilar esos cambios. Una buena muestra de ello es Noticias del gran mundo (News of the world, 2020), la recientemente estrenada película (en nuestro país a través de Netflix) del director británico Paul Greengrass, un western crepuscular y nostálgico protagonizado nada menos que por Tom Hanks, uno de los actores más respetados de Hollywood,  quien debuta –a los 64 años de edad– en este tan especial género cinematográfico.

Hanks encarna a Kyle Kidd, un capitán ya retirado del ejército confederado, quien en 1870 (poco después de acabada la Guerra de Secesión) se gana la vida recorriendo pequeños pueblos para leer a los lugareños los diarios de las ciudades importantes, las noticias del “gran mundo”. Un oficio que no era tan extraño en tiempos en que no había radio y la mayoría de la gente era analfabeta. En uno de esos viajes, Kidd se encuentra con una niña abandonada: Johanna (interpretada por la alemana Helena Zengel), hija de colonos alemanes, que fue raptada y criada por la tribu kiowa, y que posteriormente fue rescatada. Kidd asume entonces la responsabilidad de llevar a Johanna con sus parientes, aunque para ello ambos tengan que hacer un penoso y peligroso viaje hasta el extremo sur del país, expuestos a los rigores de la naturaleza y a los ataques de delincuentes y enemigos de todo tipo.

Hanks vuelve a hacer aquí un papel que ya le es recurrente: el hombre común, pero con fuertes convicciones éticas, que puesto en situaciones límites alcanza dimensiones heroicas. Kidd es un hombre callado, reflexivo y cercano a la vejez, y que por su experiencia en la guerra aborrece la violencia (al punto de andar casi desarmado) y ha aprendido a valorar la diversidad de razas y culturas. Por su parte, la historia de Johanna (dos veces huérfana, como dice un personaje) es el resultado precisamente de todo aquello en lo que Kidd abomina: violencia, injusticia, enfrentamientos raciales, etc. Y a pesar de que la comunicación entre ambos es difícil (la niña solo habla idioma kiowa y un poco de alemán), y de sus caracteres opuestos, poco a poco se va estableciendo entre ellos un vínculo filial, reforzado por las intensas experiencias que comparten en el viaje. Porque finalmente Noticias del gran mundo es también un road movie, un relato de viaje en el que los protagonistas van madurando y tomando decisiones importantes para el resto de sus vidas.

Greengrass, el director, se hizo conocido con películas de acción, especialmente las de la saga Bourne, como La supremacía de Bourne (2004) y El ultimátum de Bourne (2007, obtuvo tres premios Oscar). Pero en este caso parece haber asumido completamente las reglas del western, para bien y para mal. Para bien porque le da a la naturaleza (con una excelente fotografía) un papel determinante en su puesta en escena, incluso en la infaltable secuencia de persecución y tiroteo; también por el desarrollo de los personajes y el acertado uso de la música. Y para mal porque nos queda la sensación de que Greengrass solo pretendió hacer un drama gratificante y entretenido, dejando  de lado los aspectos más fuertes y polémicos de esta ficción; como el triste destino de los generosos kiowa, o el papel de lo “relatos” (aquí se les denomina “historias) en la formación de una identidad nacional. Noticias del gran mundo no es de las mejores películas dirigidas por Greengrass, ni encontramos en ella una de las más memorables interpretaciones de Hanks. Solo es una buena película, que disfrutarán especialmente los amantes de los westerns.