La guerra que nadie entiende

Todo indica que existiría ya una abierta guerra entre las señoras que presiden dos de las instituciones más importantes del sistema: el Ministerio Público y la Presidencia de la República. La guerra abierta es una caja de Pandora, y nadie prevé qué salga de allí; y menos se sabe cómo acabarla. Es una guerra que en su desarrollo podría derivar a situaciones tan inesperadas como la salida de Patricia Benavides o una posible vacancia presidencial.

¿Qué origina la guerra entre estos dos poderes? Si bien es difícil explicar las razones, una aproximación sería por las investigaciones que la Fiscalía le realiza tanto a la presidenta como al PCM, Alberto Otárola, por los hechos que ocurrieron hace casi un año, después del intento de golpe de Estado Pedro Castillo, una serie de insurrecciones en todo el país con lamentables saldos. 

Pero entonces, ¿a qué se debe la destitución de la fiscal Marita Barreto, pieza clave en todo el tinglado? ¿No es acaso una exageración imputar a la Fiscal de la Nación de encabezar una organización criminal? ¿Prueban acaso algo los “chats” y la comunicación del asesor/filósofo Jaime Villanueva, ahora arrestado? 

Antes de continuar vale hacer una digresión. La Constitución señala los mecanismos y procedimientos para la actuación de las instituciones respectivas en un caso de semejante impacto. Todo dentro de la Constitución, nada fuera de ella, debería ser la consigna de los demócratas.

Ahora bien, ¿quién gana con todo este embrollo? Pues ganan los que no quieren preservar la institucionalidad, y que empiezan a desarrollar la idea del adelanto de elecciones. Asimismo, los operadores políticos y las facciones autoritarias que salen a pedir la destitución inmediata de Benavides. 

En este nuevo capítulo de la politización de la justicia habría que tener cuidado en adscribirse a algún grupo o facción porque no se sabe a quién se beneficia. En todo caso, solo sirve mirar a quiénes beneficia la guerra de instituciones que pone de cabeza la gobernabilidad en medio de una recesión económica.